Las visitas virtuales son mucho más que una serie de imágenes y vídeos para mostrar una propiedad. Se trata más bien de una experiencia de compra inmersiva para los viajeros. Además, ayudan a establecer las expectativas de los viajeros, aumentar las reservas y hacer que la propiedad destaque.
Las visitas virtuales utilizan imágenes de 360 grados que crean una experiencia interactiva para los viajeros en busca de una propiedad. A diferencia de los vídeos, ofrecen a los viajeros un control total para desplazarse por la propiedad y explorar las características y los servicios que más les interesan. Los viajeros pueden acceder a la visita virtual desde el ordenador, el teléfono móvil o la aplicación para viajeros.
Las visitas virtuales no solo ofrecen una experiencia de compra interactiva, sino que también pueden reducir el tiempo dedicado a responder preguntas sobre la propiedad, lo que a su vez reduce el tiempo para reservar. Además, si se cumplen las expectativas de los viajeros, es más probable que dejen un comentario positivo.